miércoles, 23 de noviembre de 2011

Volviendo

A veces te veo en mi mente, al cerrar los ojos. De repente todo se vuelve oscuro y miles de puntitos rojos, verdes, amarillos y naranjas parpadean en esa oscuridad hasta apagarse lentamente. Ahí es cuando te veo, ahí te veo y siento que estoy más que completo,
Compre un nuevo libro ayer, compre dos en realidad y uno de ellos contiene dos novelas dentro de sí, solo leí un capitulo del primero y ansió leer el segundo y luego comprarme el tercer libro. Los cambios me impulsan a leer un libro nuevo, a escribir un amor desde cero.
Recuerdo verte y detenerme en tu retina a admirar como te ves en el reflejo de una retina que a la vez se refleja en tu retina. Tal vez eso sea el amor, el reflejo de lo que se refleja en ti, o por lo menos alguno de sus significados. Definir al amor, sería muy difícil, o demasiado fácil: según el día, según el ánimo.
A veces la nostalgia se apodera de mí, a veces detesto este presente, La vida se vuelve una palabra sin decir, se vuelve el intento de lo que no me anime a decirte.
Quisiera contarte más cosas, pero volver a escupir letras cuesta mucho y ya perdí el ritmo, me iré a dormir con tu imagen en mi mente, me iré a dormir con tu perfume en mi cuerpo (siempre me gusto la palabra perfume, su sonido, su connotación, como la dices tú cuando hablas distraída, perfume, la “rf” le dan cierta sensualidad, carácter)
Me gustaría que me digas que perfume te pondrías para nuestra cita ideal, luego acercarme lentamente a tu cuello, sentirlo lentamente, y luego rozar tus labios y detenerme en tu mirada, decirte las palabras que siempre llevan tu nombre en mi mente, darte un abrazo y dormirme en tu cuerpo hasta que el sol anochezca y la luna amanezca a nuestro alrededor.
Invítame a un lugar donde nadie haya ido, enséñame los rincones de tu corazón, dibuja nuestro futuro y luego rómpelo en mi cara, saltemos al vacio sin preocupaciones, dejemos que el viaje sea placentero, nadie tiene lo que tú, nadie tiene lo que yo tengo que es solo para vos…

domingo, 16 de octubre de 2011

Gris, nublado entre la tierra, tus pasos, los míos. Lo único que vale la pena, estar contigo

Después de varios años, he estacionado en este escritorio; buscando tal vez, un sentido. Buscando la punta de los hilos de mi vida, recuerdo cosas, y veo la vida pasar como una lenta tira de diapositivas, perfumes, texturas, colores y personas. Recuerdo los trenes, las cuadras caminadas, un saludo en un colectivo en medio de la noche, un viaje en tren hacia un viejo destino, haruki murakami dijo “el futuro es algo que se debe ver volviéndose hacia atrás”, a veces me pregunto si estaré en el futuro que quise forjar, camino volviéndome hacia atrás y miro detenidamente los pasos que he dado, todo se vuelve difuso, borroso, se mezclan las vivencias, tristezas, y las alegrías. Creo que eso debe de ser el olvido, el hecho de no poder separar al pasado. Uno nunca olvida, tan solo deforma y transforma, el pasado se vuelve una masa amorfa y va separando y agregando cosas a medida que crecemos.
Algún día extrañare los paseos en la siesta por la ciudad, mirarte a los ojos en una plaza de tribunales, despeinarte en la calle Paraguay y despedirte en la avenida Paseo Colon. Siempre me adelanto unos metros de más, para ver el momento desde afuera, me veo a tu lado, me veo feliz entre tus brazos.
El amor, a veces roza tus labios. El amor no es algo de lo que se puede andar escapando. Mucho tiempo hui a mis palabras, sabiendo que no podía ser profeta de algo que no practicaba. A veces pago cuotas atrasadas, pero en este momento no puedo hacer como si no viera ciertas cosas, a veces pienso. A veces me veo bajo las estrellas en un campo desolado, contigo al lado en silencio, y en el silencio hablando.
Las nubes cubren el cielo, está cayendo cenizas volcánicas de nuevo, tengo algo de tristeza, algo de pereza.
A veces duelen, a veces me duelen los pensamientos. Acompaño mis soledades y me despido de todo como si fuera a morir. No te hablo, de cosas que nunca supe, a veces te cuento en mi mente de cómo me encuentro, luego te veo y me bloqueo.
Nunca entenderás mis silencios, estamos a mil kilómetros de distancia. Me cuesta mucho describirte ciertas cosas. Siempre hablo de cosas y nunca te las defino. Me cuesta mostrarme tal como soy ante los ojos de los que no saben nada de mí.
“Tu tienes esto y yo aquello, joder no quiero rayarte” ¿será todo así? Nunca supe muchas preguntas, tengo un bolso repleto de ellas en mi espalda, a veces las elijo para las que creo que encajan en ciertas circunstancias, sueno un poco cursi, sueno un poco solo, sueno, como nadie.
Todos buscan una casa grande, un auto lujoso, un perro en el parque y un niño en la mecedora. Nunca podre involucrarme en esas cosas. No tengo planes para otra felicidad, unos duros en los bolsillos, una moneda para decidir mi destino, un cuaderno y un papel, creo que eso para mí es la felicidad. Sentir el viento en el rostro, mirar al cielo, tocar las nubles, acariciar tu rostro, mirar atrás y besarte como en los viejos tiempos.
Mis vidrios se empañan y no te puedo sacar de mi cabeza, recuerdo tu rostro reflejado en la pupila de mis ojos, tu pelo en mi pecho, hacer círculos en tu cabeza, y luego hablar del infinito con tus labios.
Estoy volviendo de a poco, estoy volviendo lentamente, recuperándome de los golpes, curando mis heridas y volviéndome a lastimar, estoy mirándote detrás de mis 6 ojos, es normal que vea mas allá que la gente común, estoy mirándote y aun no me animo a tomarte y entregarme completamente entero.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Siempre termino en vos

Cavar hondo, en los pensamientos, recordar. Recuerdo aquel cielo colmado de estrellas, tu sonrisa y el viento acariciando el césped.
A veces siento la vida pasar a mi alrededor, a veces te miro y no sé que veo, el tiempo sigue pasando y todo se transforma. La vivencias se desprenden de mi cuerpo a medida que voy caminando, te dejo en cada pasa y te encuentro en cada esquina, nunca soñé con ser alguien mas alto, nunca soñé con tener muchas cosas, tan solo quería poder mirar arriba. A veces divago en lo que escribo y voy de esto a aquello, y tú crees entenderme, y a veces no sé si sos vos o soy yo a quien hablo y si sos parte de todo esto; ser, estar, mirar y describir.
Mirar abajo y apuntar arriba, saltar atrás mirando adelante. De chiquito siempre me decían que en el 2000 el mundo iba a terminar, que las maquinas se iban revelar, que vendría el apocalipsis. Ahora ya con varios años y golpes encima me encuentro con la misma disyuntiva, el mundo va a acabar dentro de un par de meses, según el calendario maya. Así que, según los mayas todo va a terminar, ¿y qué hare, con 22 años? Tendré que dejar que el mundo se acabe, ¿no podre pintar más amaneceres en tu piel?
Sinceramente, poco me importa el fin del mundo, la vida sigue su curso, todos los días me levanto, me tomo el 33, a veces está nublado, a veces me abrigo, a veces me duermo y a veces hablo contigo. Me bajo una parada después del puente de la boca, miro el riachuelo todas las mañanas, me bajo estiro las piernas, llego a la esquina dejo pasar un semáforo, y ahí arranca mi día, después de ese semáforo, apago la música y enciendo la vida.
Verte entre semana, extrañarte los domingos, y necesitarte los lunes. El lunes y el domingo son dos días que más odio, están tan unidos y dejan tanta soledad en el aire, que se hace insoportable, los lunes siempre cuesta arrancar y los domingos siempre cuesta terminar.
Creo que ya perdí el toque, una vez leí en un libro, no recuerdo bien cuál es, que decía algo así, que la literatura era poder decir con muchas palabras lo que la gente normal solo puede describir con una. Toda mi vida fue así, muchas palabras, muchos mareos, demasiados libros y decenas de anhelos, una vida de rimas intercaladas con risas. Yo siempre me cuento lo que va a pasar y luego intento sorprenderme.
Nunca se a donde apunto con las líneas que escribo, podría halarte del amor y salirte luego con una analogía sobre el sabor del té. Podría decirte que si te soplo el ojo se te caerían todas las pestañas y si te lo beso se humedecería tu corazón. Podría contarte cuando me caí por primera vez de una bicicleta, podría decirte que mis cicatrices no significan nada. A veces la gente oculta sus miedos, a veces soy igual que todos los mortales y tengo miedos de mortales, cuando te despido ya lo he ensayado trescientas veces en mi cabeza, y siempre me sale mal, siempre termino haciendo otra cosa.
Cada vez me cuestan más los remates, siento que me enredo, y no hay shampoo para un enredo de palabras, tan solo se, que dentro de un par de meses si acaba el mundo estaré seguro de varias, cosas , encontré la felicidad, la retuve el tiempo máximo, uno no puede ser feliz toda la vida, por eso hay días que uno se despierta con el alma bajo el brazo, para prolongar la felicidad, por eso te miro con un ojo a veces, para poder tenerte más de una ves día a día. Me iré a dormir, mirare al techo antes de taparme por completo, respirare hondo y sentiré tu perfume en mi corazón, exhalare y aparecerás como cada noche, para darme el beso de las buenas noches y ahuyentar a mis fantasmas.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Con un té y una ciudad con colores

Uno se pasa la vida buscando sus mitades, eso que algunos llaman “media naranja”, no se a quien se le puso en la cabeza que el amor era como una góndola de verdulería de supermercado coto, donde la gente puedo ir a comprar frutas cortadas a la mitad. A veces cuando me miro en el espejo busco cosas que nadie ve, y me pongo minucioso en esa búsqueda, para poder descubrir lo que vos descubriste en mi, ese “eso” que tiene cada persona para enamorar a otra. Te miro y es imposible no ver ese “eso”, en realidad en vos no veo “eso”, sí no el “todo”. Me cuesta ser muy expresivo, y no se a donde va esto que estoy escribiendo, tal vez será el hecho de que hace días que no escucho tu voz y tan solo extraño el sonido que generan tus palabras en mis oídos, el amor es un tanto egoísta, uno busca la persona que le hace bien, la que sea “lo mejor para él/ella”.
Muchas veces intento saber si te amo por necesidad o por sinceridad. Yo creo y siento que es por sinceridad, y que te necesito a mi lado porque es la única manera de demostrarte lo mucho que te quiero. No sé si esto será una carta o una declaración de sentimientos, tan solo necesito escribir. Necesito plasmar cosas, muchas siempre te las digo y muchas otras siempre las oculto, me da vergüenza volverme un romántico, pero detesto a la gente que para amar se pone en piloto automático. Deja que la vida pase y parece que no sienten nada de lo que viven.
Detesto que la vida para algunos sea como una serie de fox, para mí las cosas son más interesantes y más crueles en cierto sentido. Acá no hay guiones aunque a veces lo parezca.
La vida es más interesante que una publicidad de galletitas rex, yo amo cuando haces esos gestos que nadie puede hacer, amo cuando miro en mi campera y encuentro un cabello colorado, amo que tropieces cuando caminas a mi lado, y estoy más que feliz de que hayas tropezado con migo en esta vida. Nunca busque mi media naranja, siempre me creí bastante entero como para tener una mitad, ahora me doy cuenta de que vos no sos mi media naranja si no que sos mi naranja entera, y puedo tenerte para mí y volverme egoísta con el mundo, tenerte y entregarme, porque el amor es entrega y a veces decisiones.
Quizás sea la soledad de la noche, la complicidad de mi taza de café, pero creo que en este cuarto faltas vos. Nunca encontré las palabras justas y escribirte siempre fue difícil, pero ahora que estas lejos y que restan días para verte, quizás con estas palabras me acerque un poco más a vos. No sé que será del destino ni de mi vida, pero espero sigas en mi por mucho tiempo más.
Necesito que te quedes un poquito en mi, necesito que estés aquí cuando oscurezca, si te pido mucho te tendré poco, y si te doy todo quedare vacio, espero que tengas el tiempo, para poder entregarte en raciones lo que soy. Tengo el tiempo y te lo regalo, ya corrí muchos bondis y todos se me fueron, me acostumbre a llegar tarde, pero en esos viajes a destiempo te encontré a vos, prefiero caminar a tu lado, mientras el sol se aleja de la ciudad, quiero mirarte a los ojos y descubrirme en tu mirada, quiero que me mires como nadie. Quiero, simplemente que me abrases para poderme dormir…

lunes, 15 de agosto de 2011

El dilema de tener, querer aceptar. A veces necesitar, a veces querer y otras olvidar.

¿Como explicarte esto, el otro y aquello, como decirte que te amo sin marearte?
Cuando uno extraña es porque algo le falta, o algo que tuvo antes y le hacia bien ahora no lo tiene a su alcance, el amor y sus jugarretas nos distraen.
Antes extrañaba algunas cosas y hoy extraño otras, me robaste las palabras y no sé si las podre recuperar. Como un niño en la oscuridad voy tanteando con las manos para encontrar mi camino. A veces me topo con cosas que no quiero, pero que no veo y que no descubro hasta que no cambian o por lo menos hasta que no se muestran completamente como son, creo que esa sería la forma más clara de representar la confianza, un niño caminando en la oscuridad guiado solo por tu voz.
Muy pocos libros me devuelven al mundo, muy pocos libros hablan de vos cuando no quiero saber de nada. A veces te extraño, a veces me veo y me siento un extraño. No confundas las rimas con el sentido. Vos tenes algo de rimas y algo de sentido, pero a tu lado todo toma su rumbo correcto, como en una película de tim Burton.
Al lado tuyo los meses se me escapan de los dedos, al lado tuyo no amanece hasta que me duermo. La noche se vuelve eterna y tengo las estrellas para mí solo. A veces el amor es el silencio, el silencio en el que solo con vos me encuentro.
La gente se pasa la vida perdiendo el tiempo en charlas que no llevan a nada, se pasa la vida temiendo que su voz no sea escuchada y sin embargo yo puedo estar en silencio mirando las estrellas con tu cabeza hundida en mi pecho y volver ese momento eterno, hay mas palabras en mis ojos que en estas líneas, a veces, solo digo “a veces” para no decir “siempre”, te extraño.
Podría decir muchas cosas, en realidad no puedo, el tiempo, o algo me está cobrando todas las palabras que dije antes, y ahora solo me quedan los sentimientos sueltos, como cuando uno anda con un agujero en el bolsillo perdiendo monedas.
Yo perdí las palabras, perdí y ahora tengo que aprenderlas de nuevo. Muchas veces es fácil decir lo que uno siente y muchas otras es imposible.
Siento que hay palabras que se gastaron de tanto uso, tendría que inventar un calco semántico para la palabra amor, tengo que encontrarlo, amor ahora no significa lo que antes, ahora la gente ama al plástico, al papel y a los metales. El amor tiene que sentirse entre los dedos cuando uno camina y el viento le roza los dedos. El amor no tiene sentido cuando solo significa que me voy a comer un bonobon, los publicistas arruinaron al amor. Los desvalorizaron, tenían tantas cosas para arruinar, y arruinaron lo único que vale la pena, ahora hay que comprar para querer y hay que trabajar para poder amar.
Creo que la desvalorización del amor, empezó con los peluches con corazones, o cuando se suplanto al amor por un corazón, antes la gente sentía más. A veces cuando está todo dicho no queda nada para sentir. Ya ni hasta triste puede estar uno que tiene una tipografía para la tristeza,- me siento un viejo, un nostálgico, arrancar una flor puede ser tomada como un posible modelo de publicidad, o como algo que suele hacer la gente, ahora hay que esforzarse el doble para decir las cosas.
Hay pocos espacios para la sinceridad, uno se queja pero cuando tiene el momento, lo deja pasar, no si te podre decir “te amo” sin sentirme un plagiador.
Lo único que resta para demostrarte lo que significas para mi es atraerte hacia mi cuerpo mirarte a los ojos besarte la frente, taparte los ojos con la pala de mis manos y besarte como nadie. El amor se gasto, pero yo son un nostálgico de el y vos para mi sos lo único que tiene sentido cuando miro a mi alrededor.

domingo, 22 de mayo de 2011

Algo de algo

Pensarte, pensarme, estoy divagando, he borrado miles de escritos, hasta que me di cuenta que necesitaba mi catarsis, estar escribiendo esto, y contándote de alguna manera lo que no puedes saber.
Siento que esta vida, se vuelve irreal, me siento el protagonista de una gran novela, como Sofía, el personaje del libro de Jostein Gaarder, pero me pasa algo fuera de lo común, porque a demás de ser el personaje o la victima por así decirlo, soy el escritor.
Y en esta novela, de la cual soy protagonista, hasta mis personajes me traicionan, toman vida propia, y se empecinan en creer que forman parte de ese absurdo teatro al que algunos llaman “realidad”.
¿Será todo esto real?
Los besos por lo menos parecen serlo, la música, tus pasos, las sonrisas, pero hay veces en que veo que mis personajes se deschaban, cometen errores que denotan su guión.
La soledad, la necesito, te necesito cuando estoy en soledad, me mareo, y escupo mis tristezas sobre las llamas del amor, me río, y te busco, pero luego lloro sobre los hombros de tu paciencia.
Escribo oraciones en tu cuerpo con mis dedos, pero tengo miedo que descubras que dicen, seré tan solo eso, un triste tipo que le tiene miedo al amor.
Seré, todo lo que quieres, pero cuando yo quiero, no soy nada más que algo que un día no querrás, y eso asusta.Y es extremo, decir que mañana estaré mirando todo desde una sala de conferencias, y que serás mí mejor novela, pero que así también la más sufrida.
El triunfo y la fama la regalo, tan solo quiero, poder recostarme en tus brazos.
Encontrarte, fue, es, ¿será?
Soy un hombre, con ideas claras, y el corazón bastante impermeable, pero tu me puedes, y el amor, rompe cosas que otros construyen para protegerse, un día los muros caerán y seré mas débil de lo que soy, temeré, perder(te).

¿Estarás dentro del plan del narrador?
Es difícil ser personas, cuando uno es solo tres personas a la vez, es difícil explicar que cada uno lleva todos los mundos que anhela dentro suyo, es difícil decirle a la gente, que nada te importa, y que te crean.
Condenado, a elegir, condenado a tener que sentir, el ser humano se ha hecho humano, para poder sufrir, y hacer con el sufrimiento cosas hermosas para apaciguar ese sufrimiento, y así encontrar la felicidad.
Miro espejos y te encuentro, miro espejos, y espero a que el narrador, me diga que he hecho algo mal, miro, el espejo y me pregunto si él estará detrás del espejo, copiándome, o si el que esta detrás del espejo, sabe lo que me pasa.
¿Será la vida algo más largo, que un beso?
La intensidad, y sus riesgos, no todos los días, se viven intensamente, y no todos los días estamos vivos, por así decirlo, hay muertes de las que me levanto con lagañas en los ojos, hay muertes en las que incluso soy feliz, hay muertes de las que aprendí.
Renaceremos y moriremos eternamente.
Padeceremos penas y saldremos a flote, no existen pócimas mágicas, a veces, tan solo un beso, una mirada, una palabra, un gesto, será lo necesario para salir del letargo.
Revolveré las sabanas en busca de sueños, revolveré las sabanas en las que cada noche muero, revolveré las sabanas en las que siempre te espero despierto.

martes, 5 de abril de 2011

Crónica de un día devastador.

El reloj del celular marcaba las 18:04, y ya hacia mas de una hora que andaba dando vueltas por buenos aires, estaba, justo en el final de esta crónica, o valla a saber uno las jugarretas del destino quizás en el medio, volviendo para atrás y luego avanzando a pasos gigantescos, el destino es así, satírico.
El reloj daba la hora que antes mencione, después de un largo día demasiado cansador me refugiaba en esta crónica, que empieza justo después de que salgo del trabajo, o quizás antes, y a demás tiene que ver con un jueves en el que encontré algo y a demás de eso termine en una villa tomándome un precario remis y despertando a mi hermano para que me abra la puerta de casa y para que me pague el remis.
El día arranco demasiado tranquilo para mi gusto, algo movido, pero estático, siempre tuve la suerte de poder manejarme con cierta libertad en mi trabajo, por ejemplo irme al medio día y volver a las 4, 5 de la tarde y Lugo irme porque ya termino mi horario laboral. En fin, Salí del trabajo a las 17:04 renegando por regalarle 4 minutos de mi vida a esa bendita farmacia que me absorbe el alma junto con todos sus clientes, que son como garrapatas pero con ropa.
Salí y puse un disco de R.E.M en el ipod, y me limite a esperar el famoso 33 del que tanto hablan viejos escritos míos, el primer 33 paso lleno y no paro, y el segundo nunca apareció, a los 45 minutos de espera ya quería quemar al ipod y a R.E.M, justo para uno de esos bondis truchos que van a la rotonda de alpargatas y bajan por el puente de la boca hacia dock sud,(usted lector que se pregunta donde quedara la rotonda de alpargatas, yo también me lo preguntaba, lo averigüe unos años atrás en un viaje fugaz a la plata en el gastado colectivo TALP que de lujos soñar porque la verdad daba vergüenza, en ese viaje que era una supuesta excusa ir a visitar a Fede a la plata, y salir con el, en realidad iba a levantarme a una de sus amigas, con la que después tuve alguno que otro encontronazo digno de ser contado en una novela, si algún día edito una novela será sobre las aventuras y este estrecho mundo que algunos llaman realidad, y bueno iba yo muy contento en el TALP para la plata y ahí la vi. la rotonda de alpargatas, en verdad me desilusione un poco, porque siempre me había preguntado que era, y al ver que era solo eso una rotonda con una fabrica de alpargatas al costado me desilusione, y ¿que podía esperar una rotonda con forma de alpargata? ¿Un guardarrail con motivos de alpargata y decoración de yute? ).
subí al colectivo y le dije al chofer que iba una o dos paradas después del puente de la boca, y me dice “mira que esta cortado acá, me parece que voy por autopista”, a esta altura lo mire al tipo que mientras manejaba tomaba mates que eran cebados por un nn que hacia las veces de co-piloto y que seguramente a demás de su equipo de mate tendría un revolver para cualquiera que se quisiera pasar de vivo, o mismo para algún raterito de los que abundan en la famosa rotonda, que a demás de ser una reverenda garcha esta llena de chorros sueltos.
No, me bajo acá, le digo y el chofer que ya había pasado una cuadra, y el colectivo seguía con la puerta abierta, aunque ahora sospecho que la puerta esa nunca cierra, me miro como diciendo bájate y aminoro la velocidad, pero no freno, me baje corriendo y ahí pensé en que hermoso titular de diario seria, JOVEN MUERE EN AVENIDA POR BAJAR CORRIENDO DE UN SUPUESTO COLECTIVO; así que baje y empecé a caminar para tomarme el 168 en Necochea y Pérez Galdoz, pero el colectivo nunca paso y a esta altura estaba volviéndome loco.
Camine por Necochea y volví a la avenida, justo en la parada del 53 vi. que venia uno de ellos y lo pare, de yapa se me coló una vieja y los colectiveros como siempre paran a 1 metro de la vereda, y la vieja no podía subir, y como todo viejo que no sabe esperar se largo a hacer raftin en plena avenida para subir al colectivo, y al ver que se caía me dice no me ayudas, entonces yo con todo el amor del mundo tuve que poner mis manos en ese cuerpo devastado por el tiempo y empujarlo, y pesaba la vieja!, subí, agarre el primer asiento que pude, puse un disco de PINK FLOYD y me dormí, para no darle el asiento a nadie, pero como yo dije siempre esta la injusticia divina, es que me castiga en el acto, y en ves de despertarme en constitución, me desperté en Humberto primo y Jujuy, ya con un humor de mierda me baje, y empecé a caminar por Jujuy, para tomarme el 62, cruce y me compre una coca y una papas lays sabor cappresse, mientras esperaba para pagar pensaba en la publicidad que hablaba de las marcas y su eslogan LAS MARCAS IMPORTAN, ya fastidioso al ver que el pelotudo que tenia adelante comprando tardaba mas de lo normal, me olvide de las marcas y lo miraba como el tipo, abría su pepsi Light y tomaba un sorbete, como si el muy turro estuviese en una publicidad, todo en cámara lenta y yo que quería meterle la pepsi con sorbete y todo por el culo, se fue a su mundo de publicidad todo en cámara lenta, pague y dije si no me tomo esta coca voy a enloquecer, pero el aire de la avenida me renovó, y en ese momento baje varios cambios, tome el 62 a constitución mientras comía las papas y tomaba la coca con una necesidad impetuosa, pensaba, y me metía en mi mundo y deducía cosas, recordaba como antes, en aquellos viajes en que descubría, y tenia cosas para decir después de cada aventura, en ese momento descubrí, que era esto, que la felicidad estaba en mis manos y que después de semejante odisea estaba encontrando mi rumbo, y que con el tiempo todo iría mejor, y que tenia suerte, me sentía el hombre mas completo del mundo en esos asientos tan cómodos y ese bondi con aire y una coca en mi mano, sentía que por un día yo podía ser publicidad, pensé y deduje algunas bajadas, y me dije, esto es lo que necesito, tengo suerte de tener a alguien con quien compartir unos rocklets en la calle, un beso sobre un colectivo, una mirada, un novia a la cual decirle cosas incoherentes y regalarle sonrisas y gestos únicos.
Y pensaba y estaba por bajar y seguía sonando PINK FLOYD, y baje, termine las papas me faltaban unas cuadras hasta la Terminal, tire el paquete vacío de papas, termine mi coca y seguía mi rumbo, llegue a la Terminal, cargue la tarjeta del 51 y justo estaba por salir un 51 con cartel CAÑUELAS , saque el boleto de 1,75, me senté y dije ahora puedo empezar a escribir, termino justo el CD de PINK FLOYD y daba por concluida la aventura, en ese momento supe que estaba cambiando todo de nuevo y que volvía a sentirme como antes, que volvía a ser yo, entonces mire el reloj del celular y daba las 18:04 y era un buen momento para empezar a escribir mi crónica, de un día devastador.

martes, 1 de marzo de 2011

De a poco arrancamos

Ausente, sensaciones. El tiempo devasta este tonto camino, mis piernas inertes esperan consumar tu partida.
Necesito estar lejos, encontré mi destino y un boleto me limita de el, las cosas se ven tan claras. Sabemos que un día los sueños se harán realidad.
Conectarme con eso; difícil de explicar, las cosas son de otra manera cuando las vemos con claridad.
Ahora vivo la vida de una manera que no necesito, la bruma y el rocío, el amanecer y un rayo reflejado en mi retina. ¿Cómo olvidar tantas cosas que viví?
No quiero dejar lo que quiero, solo quiero encontrar lo que necesito, los sacrificios dejan secuelas, pero traen muchas cosas nuevas.
La mesa, la familia, rota, charlas banales que buscar unir pensamientos divergentes, la vida moderna apesta tanto como seduce.
Las separaciones son inevitables, el camino siempre se divide hasta en el final.
En este momento, necesito frenar para poder arrancar de nuevo. Las ideas se me gastaron y ponerlas en remojo demanda un gran trabajo.
Un día todo dejara de ser como es y la nostalgia será nuestro único sentimiento.
Un día abriré los ojos y estaré en la cama con la persona correcta en el momento correcto, mientras tanto estoy en esta jungla con mi machete abriéndome paso entre la maleza buscando alternativas, averiguando tal ves, el final.

lunes, 14 de febrero de 2011

No creas que tiene que ver con el 14 de febrero, si no con algo que esta dando vueltas

Los espacios que se crean, entre el tiempo en que estuve y en el que estaré, me deja.
A la deriva
No quiero reaccionar en forma convencional, pero ¿como evitar la atracción de energía,
Como no chocar contra los muros, y como sorprenderte sin hacer lo que todos harían?
Explicarlo, volver a lo mismo.
¿Necesitar(te), quizás?
Si supieses, a quien le hablo, el amanecer y la noche, estaban bajo tu cama.
Perderme en laberintos y encontrarme en tu cuarto.
¿Frenar?
Esa palabra hoy significa mucho, tiene mucho de tras, y quizás algo por delante.
Cansado de repetir el mismo monologo,
No se que esperar, no se si esperar, y tampoco se si realmente todo este planteo valga la pena.
Hablar al espejo no me funciona, y mirarme en tus ojos me ilusiona.
No debería de haber escrito eso, pero las cosas tienen que ser aprovechadas en el momento en que todavía se pueden revertir.
Las cosas no se si tienen es que aprovecharse, si no que tienen que disfrutarse.
Son como los caprichos, hoy leí en un pizarrón, que el amor no exige si no que solo da, el amor nunca exige, nosotros nos exigimos y por eso tenemos la supuesta “obligación” de demandar, y de exigir.
El amor, no apesta, nosotros apestamos, porque nos cuesta aceptarnos.
El amor, no es otra cosa, que nosotros, en nuestro mejor momento. El amor dura poco, porque no podemos entregarnos, y entregarse, es como morir y pasar a un mejor plano…

miércoles, 9 de febrero de 2011

Rojo, amor/dolor

Tristes destellos, un vidrio empañado, melodías perdidas en la bruma de un cuarto.
Noches que anhele poseerte.
Crímenes, tus facciones, tu cuerpo, tu mirada…
Poesía entre tus dedos, la métrica de tu cuerpo.
Piel, tu sexo. La perdición.
Un par de palabras y el humo sobre tus labios.
¡Que sensual que es mirarte hablar!
Te pediría millones de cosas y tan solo seria feliz con que me cumplas una.
Obsesión.
Perderte, mi perdición.
Hablare como si no te conociera, y perderé la cordura.
No puedo dejar de pensar y escribir, líneas/las de tu cuerpo.
Dibujo corazones en espejo y luego lo rompo.
No puedo, no debo, querer.
Rencor, pasión, discordia.
Me alejo, de la puerta, y veo el cuarto desde lejos.
El acolchado de animal print, tus portaligas contrastando con el blanco de tu piel.
La sangre se apodera de la imagen y tu cuello estrangulado ¡seria la foto perfecta!
Tus ojos blancos y un destello final.
Tus labios rojos, tal vez sabían el final, tú pelo lacio y ese corte que roza los hombros.
La escultura perfecta. El crimen; amarte.

lunes, 7 de febrero de 2011

No, me entiendas

La nostalgia se apodera de mi, las praderas quedan cerca, dentro, quizás espero encontrarte.
Escuchando viejos discos de pasta intento deshacerme de esos anhelos matutinos,
Cuando el sol empieza a ceder y la noche se cansa de dormir, yo veo, que las cosas no son del todo tan malas.
Un pedazo de recuerdo, una mesa cansada, ¿Cómo explicártelo?
La vida, y sus afluentes, siento que escribo todo de nuevo y de nuevo no me lleva a nada.
¿Los cambios donde nos dejan?
Cuestionarse, cuestionarte, no son lo mismo, porque estas cosas llevan tiempo e implican dolor, duda, causas y sobre todo consecuencias.
No me entiendo, digo cosas que luego no comprendo, me cuento el siguiente paso del guión, pero estoy demasiado atrás.
Es como ver una película en otro idioma, un idioma que ni siquiera podamos descifrar.
Dejare caer mi barba, dejare caer mi pelo y esperare a que el tiempo me quite todo lo que deseo.
Yo sabia que las cosas se me iban a ir de las manos, pero nunca puedo dejar de hacerlo, siempre se lo que vendrá pero quiero corroborarlo.
Bienvenidos a las equivocaciones, algún día escribiré esas historias que hoy siento, por el momento dejo palabras, frases que se me ocurren, tan solo cosas que no quiero perder.
Habría que vivir más de una vida para comprenderte. Tendría que dejar de fabularte.
Debería romper el vidrio y sincerarme, algún día intentare revelarme.
Espero, que entiendas que solo veo cosas que me llevan a vos, y que las mejores palabras se las dedique a algo que quizás seas vos.
Todos preguntan, a quien le escribo, y yo me pregunto si vos también te preguntaras lo mismo.
Dejo las cosas, dejo esto, porque no es lo mió en este momento.
Dejo tal vez el cuaderno abierto debajo de la cama, para escribir en sueños.
Mis caprichos estarán de tu lado, y por la mañana susurrare cosas que tal vez yo siento.
Volveré a ser yo cuando me decida a dejar de serlo,
Cambiar el mundo, no me sirve, cambiar de ropa tampoco, cambiar de pelo menos.
Todo esta dentro mió, todo. Algún día entenderemos que las cosas van más allá de nosotros, y que nosotros somos más de lo que podemos demostrar/ser/aparentar.
Las bases existen por determinadas manías del espacio/tiempo, pero en realidad todo esta dentro de nosotros y creo que después de tanto buscar eh descubierto que los colores del amor, son los colores del dolor, y que al mirarme al espejo veo lo que no quiero ver.
Me mareo e intento explicarme, cuesta mucho despertar interés en este mundo tan desinteresado, todavía hay voces que siguen rondando las esquinas, todavía hay gente que nos hace sentir que no esta todo perdido.

lunes, 24 de enero de 2011

Algo de catarsis

Nada de esto concuerda, las palabras, hoy enemigas de mis dedos.
Siento demasiada necesidad de volver a tener esa magia, extraño ciertas cosas. El tiempo creo que esta golpeándome la puerta y yo estoy haciendo oído sordo.
Perder en este tiempo seria aprovechar otras oportunidades, y la vida no me espera.
¿Esperar? ¿A quien?
Sabes de que hablo, se de que hablo y discuto conmigo mismo, es difícil romper este témpano de hielo, muchos intuyen, pocos leen.
Estamos acá, y pensamos en otras cosas, ¿y donde encajamos esto otro?

Banalidades, y volver a despertar, estos sueños ya no me llenan, estoy sintiendo el vació ante la espera de algo reconfortable. Algo, déjame decirte que te involucra a vos, o quizás a otra. Y cada vez que tomo un colectivo recuerdo un rostro, que tal vez no conocí.
Liberarme, y entregarme, ¿aceptarte?
Pienso, siempre, que estoy demasiado joven para volverme viejo, pero siempre dicen “solo se vive una vez” y eso resuena y cuesta dejar de razonar, es como no parar de pensar lo mismo, y leer la frase una y otra vez. A veces me pregunto ¿Por qué me enrosco tanto?
No puedo esperar, para arruinarlo todo de nuevo

domingo, 2 de enero de 2011

Nunca acierto en los títulos

Catarsis, siempre necesito soledades. Las esperanzas, inquietudes, las circunstancias que nos llevan a la soledad. El tiempo juega conmigo, la vida dejo en cada lugar que piso. Extrañar los pretextos que quedan plasmados en la pared como sombras de un sol que se aleja.
La poesía y la historia, la histeria y la realidad.
El camino me lleva y llevo todo conmigo, el entorno poco importa, solo importa mi interior.La soledad es soledad hasta en las masas, cada punto tiene consigo algo dentro, y dentro mió hay puntos que no desearía que observes. Cada día cuestan más las líneas, cada día todo esto es más absurdo, cada día veo mas claro que esta todo oscuro.
Las rimas son fáciles cuando estas falto de inspiración. Las cosas cambian y yo creo que cambio, creo. Intento descifrarme en el reflejo de unos ojos, busco miradas y habito cuerpos que no correspondo, me convierto en un criminal, y nuevamente en un hipócrita, estudiante de la parodia.
Sufrir, ¡que importa!, ya nada importa, la vida es un paraje oculto en un reglon de un gran libro, la vida es esto que intento escribir y que tanto degenero, la vida no me dice nada de vos ni nada de todo, es un paso dentro de un vaso, es un rastro de amor en una cama toda desarmada, una noche bajo una brisa estrellada.
Sigo buscando y nada tengo que revelar, solo observo lo que no quiero olvidar. Voy encontrando(te) respuestas, voy dejando incógnitas, necesito que mis ojos sean mas profundos que tus dudas para así poder impresionarte día a día.
Olvidare que hago aquí, al despertar. Olvidare que hay cosas mas lindas que una pantalla de led, el ritmo de esto me lleva a volverme un pedazo de realidad virtual, me lleva a estar en la mente de otros a través de un monitor, me lleva a lugares que nunca imagine, y todo por el mismo precio, la vida, el amor, la paz, las palabras dentro de mi boca, los besos dentro de tu cuerpo, los cuerpos lejanos ahora, después de esto, de aquello y de todo.